Cuando empezamos nuestro acercamiento al reino angélico queremos conocer pronto el nombre de nuestros ángeles guardianes y digo nuestros porque son ¡dos!. En el momento que el Gran Espíritu nos sopló su aliento de vida, asignó dos seres alados para custodiar nuestro Espíritu y cuando recordamos su presencia en nuestras vidas nos gustaría llamarlos por sus nombres para poder conversar con ellos.

Nuestros ángeles no necesitan que los llamemos por el nombre para conversar, sólo están esperando que nos animemos a tener una conversación desde lo más profundo y sincero de nuestro corazón. En el momento que fueron asignados como nuestros ángeles guardianes acordamos juntos sus nombres y también acordamos que si no los recordábamos, podíamos elegir otro nombre más fácil de recordar, así que si es difícil mantener un diálogo sin nombres porque aún no estas seguro de tener el correcto o no te animas a ponerles uno nuevo, puedes ensayar con "Querido ángel guardián", ¡así sin protocolos!, es un motivo de alegría para tus ángeles que puedas superar el obstáculo del nombre que te impide disfrutar plenamente de su compañía y solicitar su asistencia en cualquier momento.
Me encantaría leer tus comentarios y saber si te animaste a disfrutar plenamente de la compañía de tus ángeles guardianes.
Desde la luz que nos une,
Veisha
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